Imagen: tome.cl |
El edificio de más de mil trescientos metros cuadrados pasó el año
pasado a propiedad municipal, luego que fuera rematado como parte de la
quiebra de la textil Bellavista Oveja, con el objetivo que continuara
sirviendo como centro deportivo y recreativo de la comuna.
Sin embargo, como lo señala el informe presentado por la arquitecto
asesora urbanista del municipio, Marisa Machiavello, el edificio de dos
pisos no se encuentra en buen estado. “Sus muros presentan agrietamiento
post terremoto y estuco soplado en gran parte de sus superficies. La
estructura metálica muestra óxido y el revestimiento de la cubierta se
encuentra dañado en un 85%. Los pavimentos de madera se encuentran
dañados en un 80% y gran parte de las instalaciones son embutidas y se
mantienen las originales, que se encuentran fuera de normativa y en
regular estado”, explicó.
De ser declarado como “monumento histórico” el Gimnasio Carlos Werner
tendría una protección legal que impediría que fuera destruido y,
además, podría postular a recursos para su restauración.
Es importante considerar que mientras otras comunas como Lota tienen
hasta 10 monumentos nacionales, Tomé no tiene ninguno, pese a que
conserva numerosas obras patrimoniales, como la Parroquia Cristo Rey de
Bellavista, el barrio Carlos Mahns y la propia fábrica textil Bellavista
Oveja.
Fuente: Biobiochile.cl
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